En la fábrica de Mermeladas Artesanas de Cañá de Arriero me gustaba innovar. Prueba de ello es que comencé con 18 especialidades, algunas de las cuales solo las ofrecía mi marca, como la Confitura de Zanahoria y Mandarina, la Mermelada Albaribaza, la Confitura de Calabacín y Miel... y poco a poco fui añadiendo otras también novedosas, como la Confitura de Higo, Uva y Manzana o el Jarabe de Fresa.
Tenía algunas especialidades de corta y exclusiva producción por lo laborioso de su proceso o por la dificultad que entrañaba su logro, como la Confitura de Pimiento y Tomate y la Jalea de Membrillo, cuyos lotes estaban vendidos antes de empezar a elaborarlos. Algo así ocurría también con algunas mermeladas, como la de Higos, la de Tomate, la de Fresa y la de Naranja Agria, que eran muy solicitadas.
Pero, como decía al principio, a mí me gustaba innovar y tenía en mente sacar un nuevo producto, uno que solo tendría yo. Era una Jalea de Naranja Agria.
La jalea es un producto, cuya elaboración no es fácil y por ese motivo no la elaboran las fábricas, sino solo los obradores de algunos conventos de monjas. Mi fábrica producía ya una jalea, la de membrillo, cuyo proceso dominaba por la experiencia y como conocía bien la fruta de la que iba a obtener esta nueva, la naranja, y sus propiedades, estaba segura de que podría conseguir de ella una buena jalea. Lo más interesante era que la receta la tenía que crear yo y para ello debía que investigar y probar, una tarea que me fascina, pues me encanta ir analizando un proceso de elaboración y moldear proporciones de ingredientes y tiempos de cocción, hasta obtener un producto bueno, especial y exquisito.
El cierre de la fábrica, forzoso e imprevisto, frustró todas mis ideas. Pero el deseo de sacar la Jalea de Naranja Agria era tan fuerte, que aunque ya no pueda trabajar, me resistía a dejar de intentarlo. Me he servido de la cocina de mi casa como obrador y ahora que es temporada de naranjas, me puse a ello...
¡Y lo he conseguido! He obtenido una buena Jalea de Naranja Agria. Transparente, clara, gelatinosa, de sabor inconfundible... Y aún la puedo mejorar más.
No tengo ni que decir que el primer desayuno con esta jalea me lo he preparado para mí.
Lo
que pudo ser un producto especial y exclusivo de la fábrica, Jalea de Naranja Agria, será ahora
una conserva de mi despensa. Aun así, me alegro de tenerla conmigo porque la he creado yo. Su receta se sumará a otras en el libro de
Mermeladas y Confituras, que poco a poco voy preparando.
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