Entre las sopas llamadas "de pan", que son las más sencillas, la sopa de tomate es de las más jugosas. La preparación no tiene dificultad ninguna. El truco está en dejar cocer el pan en el caldo. Este puede ir cortado a rebanadas finas o gruesas, o troceado a pellizcos. Es mejor si está un poco asentado, que sea de uno o dos días antes, pues estas sopas se hacían para aprovecharlo. En casa, como me gusta mucho esta sopa, si no tengo el pan así, utilizo pan del día y lo tuesto.
En verano hago esta sopa con tomate de temporada y en invierno, con los que venden en el supermercado, que como tienen poca carne, son buenos para esto. La cantidad de los ingredientes es un poco al gusto de cada cual.
INGREDIENTES:
tomate
cebolla
ajo
pan
unas hojas de albahaca o de hierbabuena
aceite de oliva
sal
1. Pela el tomate, quita las semillas y pícalo. Lo mismo con la cebolla y el ajo: pela y corta a trocitos pequeños.
2. Rehoga en un poco de aceite la cebolla, el ajo y el tomate. Hazlo a fuego lento durante unos 10 minutos.
3. Añade las hojas de albahaca o de hierbabuena, la sal y el agua, que debe estar caliente.
TE EXPLICO: para una ración, la cantidad de agua es medio litro.
4. Espera al hervor y cuece 7 minutos a fuego bajo.
5. Echa en el caldo el pan como lo hayas partido. Échalo poco a poco, que se vaya empapando. Deja cocer 5 minutos más. Prueba de sal, por si tuvieras que añadir. Y remueve, el pan debe quedar un poco deshecho.
Si quieres, puedes cuajar un huevo o servirlo con huevo duro y trocitos de jamón picados por encima.
Comentarios
Publicar un comentario