Es una receta a propósito para hacer con niños, si sus padres ese día les permiten jugar con la comida. La foto ya desvela la sorpresa que encierran en su interior y esta es un huevito de codorniz. Con este contenido se podrán guisar después las albóndigas como cada cual prefiera o acostumbre hacerlo. Yo las he guisado hoy en salsa.
INGREDIENTES para unas 10 albóndigas:
1/2 kilo de carne picada
1 docena de huevos de codorniz
1 ramito de perejil
sal y pimienta
1 dl de vino blanco
harina de freír o pan rallado
harina normal de trigo
1 cebolla mediana
aceite
1. Cuece 10 huevos de codorniz durante 5 minutos de hervor. Deja enfríar.
2. Mezcla la carne con los otros dos huevitos crudos, el perejil picado, el vino, sal y pimienta. Macera 20 minutos.
3. Añade la harina fina o el pan rallado a la masa de carne picada.
4. Pela los huevitos duros, sin que se rompan.
5. Toma una porción de carne. Pon en el centro un huevito duro entero y envuélvelo.
6. Entre las palmas de las manos redondea cada albóndiga con su huevito dentro. Pásalas por la harina normal y fríelas en freidora o en aceite aparte.
TE EXPLICO: cuando hago otras albóndigas, las sofrío en el aceite que llevará su salsa, pues me quedan así más blandas. En este caso las frío más para evitar que se puedan abrir y la sorpresa se escape.
7. Pica la cebolla y sofríela en un poco de aceite en la cacerola. Agrega una cucharadita de harina y remueve para que se deshaga.
8. Ve echando las albóndigas una a una. Mueve la cacerola para que se impregnen del sofrito.
9. Añade medio vaso de agua caliente, condimenta a tu gusto y deja cocer 20 minutos a fuego mínimo con la cacerola casi tapada. Mueve las albóndigas algunas veces durante la cocción.
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