Diría yo que están por aquí durante todo el año, pero es al comenzar la primavera cuando las veo más. Me refiero a las abejas. Llegan en tropel y mientras luce el sol revolotean alrededor de las flores o se meten dentro de ellas. No se me ha ocurrido pensar antes que mientras el progreso ha cambiado el proceso de trabajo de nosotros, los humanos, las abejas han mantenido intacto el suyo para elaborar la misma rica miel.
Esta reseña que escribo hoy, sera corta de texto. No es más que para mostrarte las fotos que he tomado de las abejas trabajando en las flores de mis árboles y plantas.
Nada fácil fotografiarlas porque no paran quietas, pero yo soy paciente y he podido conseguir de ellas algunas fotos buenas.
Si hace unas semanas libaban el néctar de las flores de los almendros, están ahora en las de romero y, sobre todo, en las de azahar.
Las yemas de las flores de naranjos y limoneros están abriéndose todas a la vez y hay cantidad de abejas moviéndose entre ellas.
Me gusta verlas trabajar y me maravilla ver los detalles que puede captar el objetivo de mi cámara.
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