Hace solo dos días, han empezado a florecer los almendros. Son los primeros. Según la variedad, unos son de floración temprana, como estos, que se anticipan a la primavera y anuncian que se acerca el final del invierno.
El almendro es un árbol de hoja caduca, de la familia de las rosáceas. Las flores brotan antes que las hojas y todas sus ramas lucen durante unos días su espectacular blancura rosácea.
Nada más abrir empiezan a recibir la visita de abejas y es curioso porque estas flores huelen ya a miel.
Estas fotos las he tomado esta misma mañana. Las ramas del año pasado están llenas de yemas florales a punto de reventar. En dos o tres días, los almendros se verán blancos. Pondré entonces una nueva foto aquí para mostrártelo.
Ver así de cerca cada día la belleza que ofrece la naturaleza, es una suerte que tenemos quienes vivimos en el mundo rural.
Y así, una semana después de haber publicado las fotos anteriores, las ramas de los almendros, que se veían entonces con flores aisladas y llenas de yemas por abrir, están ahora como puedes ver en las fotos de al lado y abajo, llenas de flores y de abejas revoloteando para besarlas. Esa imagen durará poco pues en unos días serán las hojas nuevas las que abran.
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