He recogido las cerezas más maduras del cerezo y no son muchas, así que voy a reducir a la mitad las cantidades de este pastel.
Verás que es una base
de bizcocho con un relleno horneado encima.
Lo voy a hacer con
cerezas porque ahora es el tiempo. La misma receta la puedes hacer en verano
con trocitos de melocotón o también con pasas.
Necesitamos:
Para el bizcocho base:
100gr de azúcar
75gr de mantequilla
1 cucharadita de
azúcar con vainilla en polvo
1 huevo grande (L)
75gr de harina
25gr de maicena
1 cucharadita de las
de café, de levadura en polvo
Para el relleno:
75gr de azúcar
75gr de mantequilla
2 huevos
150gr de queso blanco
de untar
130gr de cerezas
maduras (las que tengo)
50gr de maicena
Azúcar glas para el
final
Utilizaremos un molde
cuadrado de 20x20cm, que untamos con mantequilla o margarina. Como no es
desmontable, vamos a poner también un papel de horno para poder sacar el pastel
con más facilidad.
Vamos a hacerlo:
Primero, el bizcocho
base. Encendemos ya el horno a 180ºC para que vaya calentando.
Batimos la
mantequilla con el azúcar. La mantequilla debe estar blanda. Como la acabo de
sacar de la nevera, la troceo en un vaso y la tengo 10 segundos en el
microondas. Vamos a batir con las varillas, pero a mano porque es muy poca
cantidad.
Añadimos a
continuación el huevo y el azúcar con vainilla y continuamos batiendo.
Aparte mezclamos las
dos harinas y la levadura, y lo dejamos caer en lluvia sobre la pasta de
mantequilla. Podríamos usar un tamiz, pero es poca cantidad y la podemos tamizar
entre los dedos. Mezclamos a mano hasta que se haya incorporado del todo.
Extendemos la masa en
el molde y lo metemos en el horno, que ya debe estar caliente. Lo vamos a
hornear durante 20 minutos.
Mientras, vamos a
preparar la masa del relleno.
Separamos las claras
de las yemas.
Batimos las yemas con
la mantequilla, que también debe estar blanda, y el azúcar. Le añadimos el
queso y lo aplastamos con las mismas varillas. Luego lo batimos un poco para
que se mezcle del todo.
Ahora vamos a
preparar las cerezas. Las lavamos y le quitamos los rabitos. El utensilio que
ves en la foto, sirve para deshuesarlas. Si no lo tienes, puedes utilizar la
punta de un cuchillo.
Este aparato les
quita el hueso y las deja enteras. Como en esta ocasión tengo pocas, las voy a
cortar por la mitad para que queden más repartidas.
Las claras las vamos
a montar a punto de nieve. Para montarlas mejor siempre añado una pizca de sal
fina, y así lo vamos a hacer también ahora.
Mezclamos las cerezas
con la masa y agregamos también la maicena.
Tenemos que cuidar
que no se nos pase el tiempo del horno, si no tiene programador. Pasados los 20
minutos, tenemos que sacar la base del bizcocho y dejar el horno encendido.
Ya solo nos queda
incorporar las claras montadas. Tenemos que hacerlo con suavidad porque se
bajan en seguida. Echamos un par de pegotones y los envolvemos
con la masa. Vamos echando lo demás poco a poco y hacemos lo mismo. Al final
podemos moverlo un poco más hasta que no quede nada de clara a la vista.
Esta masa la vamos a
echar sobre el bizcocho base, dentro del mismo molde. Si lo dejamos como 1cm
por debajo del borde, mejor. Así evitamos que rebose al subir. Alisamos la
superficie y lo metemos en el horno así como lo ves en la foto.
Lo horneamos durante 40 minutos, apagamos el
horno y dejamos dentro el pastel 10 minutos más. Luego lo sacamos y lo dejamos
enfriar a temperatura ambiente.
Después de
desmoldarlo, ya frío, lo cubrimos con azúcar glas.
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